GALÁN o RAOR.-

[PESCALICANTE]

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Llamado también lorito, pampano, etc... pertenece a la clase de los Osteictios, orden de los Perciformes, familia de los lábridos. Se encuentra en el Mediterráneo, Atlántico oriental desde Portugal hasta el Congo

Se trata de uno de los peces más bonitos de nuestras costas. Los que tienen la suerte de hallarlo su zona de pesca sabe de las satisfacciones que su pesca y degustación produce. Habita en zonas cercanas al litoral, sobre fondos arenosos o fangosos, a veces en herbarios, con claros arenosos, o cerca de praderas de posidonias, a una profundidad que oscila entre 1 a 50 m de profundidad, siendo la mas normal entre 8 y 30 metros, encontrándose más profundamente en invierno.

Es el único representante de la familia de los lábridos que vive en los fondos arenosos. Cuando se ve amenazado se entierra rápidamente en la arena, con la cabeza por delante, no saliendo de su encierro hasta que no ha pasado el peligro. Su cuerpo es muy comprimido, la cabeza elevada y frente casi vertical, el arranque de la aleta dorsal se produce en la nuca. Su tamaño puede alcanzar 30 cm de largo. Se alimenta de invertebrados, y pequeños peces, bentónicos (moluscos, crustáceos), o sea los que se encuentran pegados al fondo.

Es una especie hermafrodita proterogí­nica. Cambia de sexo cuando alcanza una longitud de unos 17 cm, primero es hembra y después macho. Cambia de color cuando pasa de hembra a macho, las primeras son rojizas y los segundos tienen un color verdoso azulado. Tiene una longevidad de unos 7 ó 8 años. Su reproducción se lleva a cabo lugar al final de verano. Los huevos son esféricos y flotantes.

CUIDADO CON LOS DIENTES: Este precioso pez posee un par de dientes caniniformes (tipo vampiro) en cada mandí­bula. Sabe que los tiene y los usa para defenderse incluso fuera del agua, sobre todo cuando vamos a desanzuelarlo. Si nos muerde no nos va a causar una gran lesión, aunque si un pequeño disgusto. Por ello y debido a lo resbaladizo de su cuerpo, se recomienda agarrarlo ayudado por una bayeta o trapo que tendremos preparado al efecto. Una vez desanzuelado aguanta bastante tiempo vivo fuera del agua.

EL MEJOR CEBO: Aunque este pez come casi todo, lógicamente hay cebos a los que entra mejor, por ejemplo la gamba fresca. Buscaremos gamba de 2ª clase, o gambusin, pero que estén frescos. También lo pescaremos con otro tipo de cebos como jurel fresco, sardina, calamar, jibia, etc.

APAREJO: El aparejo no puede ser mas sencillo: Un pater noster formado por un hilo madre del 0,50 y dos o tres anzuelos del 12 (preferibles los de pata larga) con brazolas de nilon del 0,35 o 0,40. Sedal como siempre de primera calidad. Los anzuelos deben de ser de primerí­sima calidad, con punta afilada quí­micamente, ya que de ello dependerá en gran parte una buena o regular pesca.

COMO PESCARLOS: A este maravilloso pez le afectan en gran medida las temperaturas del agua. Es un animal de aguas calientes, y si por cualquier circunstancia bajan la temperaturas del agua, bien sea por corrientes o temporales, deja automáticamente de picar a nuestros engaños. Por eso no se producen capturas durante el invierno, su pesca se lleva a cabo durante los meses veraniegos desde junio hasta octubre.

La acción de pesca no puede ser mas sencilla, una vez conocido el lugar de querencia de los mismos calaremos las cañas y nos dejaremos ir a la deriva. Lo mejor es que haya un poco de marea, ya que si permanecemos fijos en el mismo sitio una vez capturados los de ese lugar las picadas serán muy espaciadas. Por eso es tan importante una buena marea. Nos dejaremos ir, como decimos, hasta que dejen de picar, momento en el que retornaremos al lugar de origen.

Es una pesca muy activa hay que estar atentos a la picada para dar el tirón de enganche. Sus picadas son fuertes para el tamaño del pez. Una vez enganchado no es necesario "trabajar" el mismo dado, lo subiremos sin mas. Esta pesca es tan divertida que es la preferida de los pequeños que alguna vez nos acompañan a pescar. No es difí­cil en sus buenos momentos hacer dobletes o tripletes, pero ¡¡cuidado tampoco es difí­cil de que vengan junto a las temibles arañas, por ello es de vital importancia que los menores que vengan a practicar esta pesca sean advertidos de este peligro y que no suban abordo ningún pez sin que sea examinado por los mayores, siendo muy aconsejable el que conozcan bien las especies peligrosas para evitar disgustos.

UN VERDADERO MANJAR: Si divertida es esta pesca, se queda corta en relación con el sabor de su carne. Es un verdadero manjar en lo que se refiere a pescados. Su forma de cocinar preferentemente frito. Puede cotizarse a precios elevadí­simos, sobretodo en la zona de Baleares y Cataluña. Por el Sur, sus precios, aunque altos, son mas asequibles.

fuente: pescamarina.com

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No son habituales en la zona alicantina, pero en Baleares si, donde incluso tienen un periodo de veda... Os dejo un interesante reportaje publicado en Diariodeibiza.es:

El 31 de agosto finalizó el perí­odo de veda del `raor´ (Xyrichthys novacula) y ayer, sólo en aguas de Formentera, se hicieron a la mar unas seiscientas embarcaciones de recreo pitiusas en busca de una de las especies estrella de Balears y especialmente de estas islas. Los fondos arenosos de hasta de 30 metros de profundidad son los lugares preferidos por los pescadores, que sólo pueden capturar 50 ejemplares por dí­a y licencia con un peso máximo de cinco kilogramos.

FORMENTERA | CARMELO CONVALIA
Era el dí­a esperado por centenares de aficionados a la pesca y se lanzaron al mar ávidos de llevarse a casa una buena ración de raors (en castellano lorito o galán). Los vigilantes de la Reserva Marina de es Freus y la inspección de la conselleria de Pesca de Eivissa recorrieron ayer las aguas de las Pitií¼ses sin registrar irregularidades. En total, pidieron la documentación y la correspondiente licencia de pesca, imprescindible para tirar una caña al agua, a los tripulantes de una treintena de embarcaciones de recreo. El buen ambiente que acompañó la jornada de pesca fue la nota dominante entre la flota de recreo.

No fue así­ en dí­as anteriores, cuando se abrieron una docena de expedientes, según fuentes de la Reserva Marina, ya que el vigente periodo de veda en el caso de Eivissa y Formentera está fijado entre el 1 de abril y el 31 de agosto. La cifra de infractores no se considera especialmente preocupante y es la excepción, ya que lo normal es que los aficionados cumplan con la normativa.

El periodo de veda del raor se hace coincidir con el perí­odo de crí­a, fijado a finales del mes de agosto, para evitar la captura de hembras que todaví­a no han desovado. Los pescadores profesionales fueron los que en el año 2000 presionaron para que el Govern balear estableciera una veda que se aplica desde entonces. En el caso de las Pitií¼ses, y al igual que en 2007, la veda ha durado más que en Mallorca y Menorca, donde terminó el pasado 15 de agosto. La conselleria balear de Pesca ha anunciado que para 2009 el periodo de protección de esta especie terminará en todo el archipiélago el 31 de agosto.

El raor tiene una caracterí­stica muy especial y es que cambia de sexo cuando alcanza cierta longitud: primero es hembra y después macho, es decir, que es hermafrodita. Y cambia de color cuando pasa de un sexo a otro: las hembras son rojizas y los machos tienen un color verdoso azulado. Los huevos son esféricos y flotantes.

El jefe del servicio de Recursos Marinos de la conselleria balear, Antoni Grau, explicó a mediados de agosto que el seguimiento de esta especie se realiza desde 1996 y la veda se aplica desde 2000. En los ocho años de veda el tamaño promedio del raor se ha incrementado en 20 milí­metros, lo que supone un aumento del 75 por ciento del peso.«Dos centí­metros es más del doble del peso, con lo cual si antes para obtener un kilo eran necesarios entre 30 y 40 ejemplares, ahora con 20 raors ya hay un kilo», explicó Grau.

El patrón mayor de la Cofradí­a de Pescadores de Formentera, Josep Juan, manifestó ayer tras recalar en el puerto de es Caló que habí­a observado con satisfacción que las hembras capturadas habí­an desovado y recordó que cuando la veda terminaba el 15 de agosto esta situación no se producí­a.

Este pescado es uno de los más codiciados de Balears y desde que existe la veda, el interés de los aficionados ha ido en aumento. La prueba son las seiscientas embarcaciones que ayer se hicieron a la mar en es Caló, Punta Prima, es Freus y Cala Saona en Formentera. La actividad era importante también en es Jondal y otras zonas de la costa de Eivissa (No hay datos de los barcos que se lanzaron a por el codiciado pez en la costa ibicenca). La estimación es que hay una media de tres licencias por barco, lo que representa alrededor de 1.800 cañas en el agua sólo en Formentera.

El precio del raor en las pescaderí­as de esta isla ayer por la tarde era de 42,5 euros el kilo, 2,7 euros más que el pasado año. En cambio, la fiebre en Mallorca por este pescado es mucho mayor teniendo en cuenta que en agosto el kilo se situó entre los 90 y los 110 euros. La realidad es que en estos primeros dí­as de septiembre el raor se convierte en el plato estrella de los restaurantes de Balears.