Los meros son un grupo de unos 20 géneros en la subfamilia Epinephelinae de peces perciformes. Presentan un cuerpo robusto, con una cabeza grande en la que resaltan los ojos globosos y unas grandes mandíÂbulas. Su hábitat son las zonas rocosas de aguas templadas y tropicales, con grandes piedras o cuevas submarinas, en cotas que oscilan entre los 4 y los 350 m. Los ejemplares más grandes pueden llegar a alcanzar más de 1 metro de longitud y más de 40 kg de peso. Se trata de especies hermafroditas proterogíÂnicas cuya madurez sexual se alcanza a los 5 años.
CaracteríÂsticas
Es un pez de aspecto robusto perfectamente adaptado a la vida en los fondos. La mandíÂbula inferior sobresale de la superior. Tiene color marrón con manchas blancas, aunque esta coloración puede variar increíÂblemente dependiendo de la situación. Cuando lo encontramos entre dos agua, hecho bastante extraño, tiene un color marrón más uniforme, cambiando también con la luminosidad. Puede alcanzar tamaños muy grandes llegando en el mediterráneo a pesar 50 kg de peso y medir de 1,2 a 1,5 metros con una edad de 50 años.
Hábitos
Se trata de un pez solitario, que vive en una zona limitada pero con un buen número de agujeros donde cobijarse. Varios de esos agujeros serán vivienda habitual, mientras los otros, no pasarán de refugios momentáneos. Se alimenta de otros peces más pequeños, algunos crustáceos, y sobre todo de pulpos que parecen gustarle mucho. Se reproduce en verano, cuando los individuos sexualmente maduros tienden a agruparse en zonas reducidas, a 15-30 m de profundidad. A lo largo de su vida (después de 10 o 12 años) el mero cambia de sexo, pasando de hembra a macho.
Forma de pesca
Al sentirse herido por el anzuelo se enroca habitualmente en su guarida, abriendo totalmente la boca, por lo que habitualmente dificulta su recuperación. Generalmente entra bien a cualquier cebo, nunca sube a la superficie, se sabe que en algunos casos las hembras cargadas de huevos no pueden permanecer en el fondo y muy temporalmente hasta el desove estan entre dos aguas.
La pesca del mero desde costa con caña es extremadamente difíÂcil, tanto que las capturas de estos peces pueden definirse como casuales. Su escasez en nuestras aguas superficiales hace muy difíÂcil sentir una picada de este pez. Además, en caso de una picada casual en nuestro sedal, el mero se encueva rápidamente siendo prácticamente imposible sacarlo de su refugio.
El mero es un pez predominatemente carníÂvoro, se nutre, sobre todo, de moluscos cefalópodos. Su presa favorita es el pulpo, al que persigue agresivamente durante las horas nocturnas.
Pescasubmarina: Se podríÂa decir que en algunas zonas es la captura por excelencia. Debido al peso y tamaño que pueden alcanzar, coge solo ejemplares adultos que ya habrán cumplido su función reproductiva. Y no dispares si no hay posibilidad de cobrar la pieza.
Generalmente es un pez que se pesca a bastante profundidad, y ofrece mucha resistencia a ser extraíÂdo de su cueva, por lo que hay que extremar las precauciones en lo relativo a esfuerzos y líÂmite de la apnea.
Una vez sacado de su tana o cueva, ojo con agarrarlo metiendo las manos por los opérculos, ya que están dentados y además poseen una mucha fuerza.
fuente: http://es.wikipedia.org
